Quién no ha tenido que
hacer alguna vez el clásico FODA, muchas veces obligados a hacerlo por cumplir
alguna tarea o trabajo final de un curso y puede que no hayamos hecho un
análisis profundo de nosotros mismos porque solo era por cumplir. Pese a ello, no
deja de ser necesario y la importancia radica en su primer componente: Fortaleza.
Las personas que saben
cuáles son sus fortalezas pueden lograr explotarlas y desempeñarse en lo que
realmente son buenos y más aún si hacen lo que les gusta.
Si bien es un proceso
algunas veces profundo, que requiere de mucho tiempo y constancia de nuestra
parte, que muchas veces no tenemos o no somos tan conscientes de su
importancia, no es imposible. Pero algo que debemos saber es que no se
descubren inmediatamente, por lo que no debemos desanimarnos en el camino.
Encontré algunas ideas que
nos pueden ayudar a encontrar algunas pistas para descubrir nuestras fortalezas
y dicho sea de paso encontrar nuestra pasión.
1) PREGUNTAR POR 3
FORTALEZAS A 10 AMIGOS
Una idea que encontré muy
práctica es decirle a 10 conocidos, compañeros de trabajo, amigos o familiares
que te digan 3 fortalezas tuyas.
Mejor si estas personas
son de lugares o ámbitos diferentes, te dará una mejor perspectiva de ti.
Sería conveniente que
puedas darles el tiempo suficiente para que te respondan, muchas veces bajo
presión te pueden decir algo por hacerte sentir bien o por cumplir, pídeles una
observación realista y sincera. Mejor si es por escrito, así pueden explayarse
mejor.
2) SEÑALES DE EMOCIÓN
Es muy posible que de las
actividades que realices en la semana, haya algunas de las que disfrutas mucho
más que otras, aquéllas que sientes que transcurre el tiempo y no te das
cuenta, aquéllas en las que te enfocas tanto y disfrutas de ello, en las que te
sientas satisfecho por haberlas realizado. Aquéllas en las que tu emoción es
visible. Puedes hacer una lista de estas actividades y ver qué en común
tienen todas estas y por qué te agradan tanto.
3) LOGROS Y
RECONOCIMIENTOS
Hay algunas cosas que si
bien nosotros no nos damos cuenta, hay otras personas que sí lo notan y
probablemente hayamos obtenido algún reconocimiento en nuestros trabajos por
ello, algo que ha sido constante en todos o al menos en la mayoría de trabajos
en los que has estado, en qué cosas han notado los demás, sea tus compañeros de
trabajo o jefe, que haces bien y eres bueno. Identifica lo que haces diferente
a los demás, porque en una situación en la que realmente
estás usando tus fortalezas, resaltas de entre los demás.
4) ANALIZA TUS CONSEJOS
Si eres de las personas a
quien acude algún amigo a pedir algún consejo o ayuda en algo específico,
identifica cuál fue el motivo por el que acudió a ti, y qué te hizo a ti poder
ayudarlo, qué salió en ti tan natural que pudiste transmitir a la otra persona
lo que necesitaba y cómo te sentiste tú al brindar tu ayuda, identifica si fue
un tema en particular o algún área de tu interés.
5) EXPLORA TU NIÑEZ
También se dice que de
niños afloran todas las cosas que nos gusta hacer. Puedes recordar cuáles eran
las cosas que te encantaba hacer de niño o adolescente, cómo te sentías o qué
era lo que disfrutabas hacer. Puede que esas actividades no las realices ahora,
pero explora por qué te gustaba, busca el fondo de las cosas.
El reconocer nuestras
fortalezas nos ayuda a nivel personal a moldear nuestra marca personal y en el
ámbito de negocios nos ayuda a incrustar nuestra esencia en el producto o
servicio que ofrezcamos, porque es cierto cuando dicen que tal vez haya muchas
otras personas que ofrezcan lo mismo que tú, pero la forma cómo lo hagas, cómo
transmitas y conectes con los demás es lo que marca la diferencia.
“Cuando hacemos cosas para
lo que somos realmente buenos, nuestra visión para los negocios es más rápida”. Tod Kashdan
EXPLORA,
RECONOCE Y DEFINE LO QUE TE HACE DIFERENTE A LOS DEMÁS.
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